viernes, marzo 09, 2007

Testosterona Efimera

Fuimos al cine y te pasabas la mano por debajo del suéter. Te acariciabas el vientre y te recargabas a mi butaca. Me hablabas cada vez mas cerca y siempre sonreías. Besame, besame, besame al salir. Me invitas a tu casa y yo desaprovecho toda oportunidad de besarte.


Te di un beso en el cuello mientras rodeábamos el Zócalo a media noche. Me atendías como rey y la comida juntos era todo un agasajo. Unas manos preciosas y una personalidad encantadora. Y esos ojos verdes, esos ojos verdes, esos ojos verdes. Es usted mi hombre perfecto, Doctor de la Teja... ya lo sabe.

Bailabas y cantabas frente a tus amigos, me platicabas de tus desamores y me negabas besos, con el afán de no recordar la nostalgia del pasado. Eres difícil. Y ya no nos queremos. Solo quería saber porque me gustaba estar contigo, solo quería recordar un fin de semana en Mexicali, un fin de semana que paso entre la cama y la cocina.

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